Los ingredientes de la eyaculación masculina
Contrario a la creencia popular, la eyaculación masculina no se produce exclusivamente en los testículos. Tus testículos son responsables de producir las células espermáticas, que nadan en el líquido seminal que es producido en las múltiples glándulas en el sistema reproductor masculino. De hecho, las células espermáticas solo componen del 1% al 5% de la eyaculación masculina, el 95% restante del líquido seminal eyaculado se encarga de ayudar, propulsar, alimentar y proteger esas preciosas células espermáticas en su búsqueda de un óvulo para fertilizar.
“De hecho, las células espermáticas solo componen del 1% al 5% de la eyaculación masculina.”
El líquido seminal (semen) se produce en una variedad de localizaciones incluyendo los testículos (1-5%), la glándula prostática (25-30%), las vesículas seminales (65-70%) y las glándulas bulbouretrales (menos del 1%).
Si utilizamos una analogía comparando el sistema reproductor masculino con un sistema de ríos, los testículos serían el inicio del río, el epidídimo sería una pequeña laguna para el esperma, las vesículas seminales serían la primera corriente tributaria, la glándula prostática sería la segunda corriente tributaria, las glándulas bulbouretrales serían la última corriente tributaria y la punta del pene sería el desagüe. Es una extraña analogía, pero funciona.
Testículos: Células espermáticas – Espermatogénesis
Comenzando con la producción de células espermáticas en los testículos, el proceso de hacer semen ha comenzado.
Las células espermáticas son producidas en los túbulos seminíferos en el testículo (los cuales constituyen la mayor parte de cada testículo) y7 luego son almacenados en una estructura en los testículos llamado el epidídimo. Desde allí ellos viajan a través de los conductos deferentes – el tubo largo y delgado el cual es el blanco del “corte” cuando un hombre se somete al procedimiento de una vasectomía.
El sistema reproductor masculino está produciendo constantemente esperma desde el momento en el que un hombre entra a la pubertad hasta el día que muere. La mayor parte de su vida los testículos del hombre están produciendo unos sorprendentes 200-300 millones de espermatozoides diarios. ¡Eso está muy cerca de los 3000 espermatozoides por segundo!
Toma al menos tres meses para que una célula espermática madure desde una célula germinal o célula madre hasta un espermatozoide funcional capaz de fertilizar un óculo femenino.
Las vesículas seminales: el mayor contribuidor con un 50-80% (!)
Estas glándulas especializadas son responsables de casi la mitad del líquido que eyaculas como semen. El par idéntico de vesículas seminales están localizadas en el interior del cuerpo masculino. – localizadas detrás de la vejiga urinaria y justo por encima de la glándula prostática – cada una posee de 5 a 10 cm de longitud y se encargan de secretar un líquido transparente a veces ligeramente amarillo pegajoso que sirve para un gran número de propósitos.
Como las células espermáticas prosperan en un ambiente alcalino, las secreciones de las vesículas seminales se encuentran típicamente dentro del rango de pH de 7.0-8.0. Los espermatozoides necesitan combustible, y las vesículas seminales lo aportan en forma de fructosa (azúcar). De la misma manera es encontrado en el líquido seminal proteínas, enzimas vitamina C, potasio, prostaglandinas, y otras medidas para ayudar al esperma.
Una pequeña cantidad de líquido seminal es almacenado en las vesículas seminales y cuando un hombre se excita estas producen más cantidad de manera anticipada a la eyaculación. Se ha sugerido que si incrementas el tiempo que estas excitado y con el pene erecto, se incrementara la cantidad de líquido que es producido. Es por esto que algunas de las eyaculaciones más grandes eyaculaciones provienen de la abstinencia (para almacenarlo) así como también excitación prolongada “llevar al límite”.
A contrario de la glándula prostática, las vesículas seminales no pueden ser estimuladas manualmente.
La glándula prostática: más líquido y contracciones orgásmicas.
La glándula prostática es del tamaño de una nuez grande o de una pelota de golf. Secreta un líquido blanquecino lechoso que le da al semen su característico color blanco y representa cerca de un cuarto o un tercio del volumen total de una eyaculación.
La secreción prostática es rica en nutrientes como zinc y calcio, así como también en enzimas como el PSA (Antígeno prostático específico), proteínas, hormonas, ácido cítrico, prostaglandinas, lípidos y muchos más componentes, orientados a a asegurar una óptima salud de los espermatozoides. Es ligeramente alcalino teniendo un rango de pH óptimo entre 7.0-8.
La próstata está compuesta de casi 30% de masa muscular y también es parcialmente responsable de la “agradable sensación” de las contracciones orgásmicas que impulsan los chorros de semen durante la eyaculación. Algunos hombres reportan aumento de la intensidad de los orgasmos al estimular su próstata bien sea a través del ano o ejerciendo presión en el periné (el área entre el escroto y el ano).
Desafortunadamente la glándula prostática tiene una mala reputación por causar problemas de salud en los hombres a medida que envejecen. Aproximadamente el 50% de los hombres con edad de 50 años o más tienen una próstata aumentada de tamaño causada por una condición conocida como hiperplasia prostática benigna (HPB). El cáncer de próstata es el segundo detrás del cáncer de pulmón en términos de muertes causadas por cáncer y encabeza la lista entre las causas de muerte en hombres.
Las glándulas bulbouretrales: lubricante pre-eyaculatorio
También conocidas como glándulas de Cowper, este par de glándulas son las últimas en contribuir con la eyaculación. Cada una del tamaño de un frijol, están localizadas debajo de la glándula prostática cerca de la base del pene. No contribuyen mucho o casi nada al volumen de la eyaculación, en vez de eso, juegan un papel especial en preparar a la uretra para la eyaculación.
Las glándulas bulbouretrales son responsables por la pre-eyaculación (o líquido preseminal). Esta sustancia transparente y resbaladiza lubrica la uretra para la eyaculación y neutraliza cualquier rastro restante de orina ácida. Es lo suficientemente resbaladiza para ser utilizada como lubricante para el sexo, pero usualmente la cantidad de líquido pre-seminal disponible no es significante.
Encontrar una manera de aumentar la pre-eyaculación es un deseo común entre los hombres de todas las edades. Dado que estas glándulas no pueden ser estimuladas manualmente, solo podemos tratar de proporcionar las condiciones óptimas para que produzcan la máxima pre-eyaculación durante el sexo o la masturbación. Permanecer bien hidratado es importante. Llegar al límite, o permanecer lo más cerca posible del orgasmo sin eyacular, durante el mayor tiempo posible es generalmente la mejor manera de producir mucho líquido pre-seminal.
¿Cuáles son los ingredientes del semen?
En pocas palabras, el líquido seminal se compone principalmente de agua, proteínas, fructosa y, por supuesto hay muchos otros componentes como minerales, vitaminas y varios otros micronutrientes.
Si estás buscando incrementar tu producción de semen. A menudo es más fácil encontrar factores limitantes que pueda estar obstaculizando la producción de semen saludable. La deshidratación constante puede ser un factor restrictivo para la producción de semen sano. La falta de nutrientes como Zinc o una deficiencia de vitaminas podría dificultar el desarrollo adecuado de los espermatozoides.